jueves, 28 de marzo de 2013
La noticia.
Una vez que uno lo asume, viene lo complejo, contarlo, en realidad no debería ser complicado, pero junto con la noticia vienen los reproches y quienes tal vez te juzgaran (al menos eso pensaba yo) La primera persona quien debía saberlo era mi madre, sin duda, sabía que ella no se lo tomaría mal. Pero justo cuando me disponía a decirle, no se conectó a Internet como en una semana, y yo necesitaba compartir lo que me sucedía. Un día mi hermano (que vive con mi madre) se conecta a face y yo pensé “es el momento ideal, para que los dos se enteren”. Mi corazón comenzó a latir muy fuerte y pensé en las palabras claves o en algo creativo para darles las noticia… le pedí a mi hermano que se conectara a Skype, mientras tanto yo no podía ni pronunciar en la mente “estoy embarazada” hubo un bloqueo mental, y bueno, aun la sensación de ser mamá no era algo especial en mi, así que consideré que sería suficiente, si tan solo les decía “tengo 7 semanas de embarazo”.
Mi hermano me decía que tenía problemas para conectarse a Skype, que misteriosamente la cuenta se le había bloqueado, yo le pregunto por mi mamá y me dice que no estaba… Por mi parte sentía la necesidad de contarlo en ese momento, pero pensaba que no sería justo que mi hermano se enterase antes que mi mamá, lo correcto era darle yo la noticia, así que le insistí, y pregunte que a que hora llegaría, pero Luchín (mi hermano) me decía que tarde, que si necesitaba hablar con ella, él la podía llamar. Obviamente no era la idea preocuparla, ni adelantar nada, así que bueno, tome la señal del bloqueo del skype de mi hermano y la ausencia de mi madre, como una señal para no contarles aun. Pero para mi sorpresa, al otro día, muy temprano en la mañana, me conecto y veo entres mis mensajes que mi mamá estaba en línea (En el chat), me saluda y me dice que apenas pudo dormir, porque mi hermano la noche anterior la había llamado porque yo quería hablar con ella (yo sospeche desde un comienzo que mi hermano haría eso) ella pensó que yo estaba pasando por necesidades en esta loca ciudad, que talvez podía estar sin plata o embarazada…
Yo: ¿sería muy malo?
Ella: ¿cual de todas?
Yo: la última.
Ella ¡SE CLARA! (la mayúscula es verídica)
Yo: tengo 7 semanas de embarazo…
Yo nunca le dí problemas a mi mamá, sentía que ahora en verdad se los estaba dando, estaba esperando angustiada un regaño, me asuste, me asuste como nunca esperando la respuesta de mi madre.
Ella: ¿es una broma? ¿Hija, hablas en serio?
Siempre he sido buena para inventar historias, o exagerar algunas cosas, debe ser parte de mi vocación, es recurrente en mi hacerle creer a la gente cosas que no son y bueno ahora pagaba por eso mismo. Y claro, caí en mi otra vez, “tengo 25 años, esto ya esta muy lejos de ser una broma”
Yo: mamá, es en serio, ya no puedo jugar con algo así.
Ella: Hija… es una bendición
Entre muchas otras cosas lindas que me escribió ese día, estaba claro que estaba feliz, para mi sorpresa más feliz que yo, que aun me sentía confundida, pero esa felicidad de mi madre al mismo tiempo me emocionaba y me hacia comprender mi estado, no por completo, pero lograba distinguir algo lindo y bello en mi, aun me sentía en el aire, no podía atajarlo por completo. Lo importante era que ya estaba entendiendo que tenía que compartir esa felicidad con otros de mis cercanos.
Y así, fueron pasando los días y con ello mi estado de embarazada era más aceptado, contarle a mis amigos ayudo mucho, porque todos, sin excepción alguna, se pusieron muy felices, mis amigas de la vida que son mis hermanas, lloraron, sentí en la gente que me amaba la importancia de lo que me estaba sucediendo, me di cuenta que esto no era tan solo mío, también de quienes me estiman, nuestro, de mi compañero y yo, él siempre estuvo feliz con la noticia y yo estaba cada ves más dichosa y conforme, me sentí conforme y afortunada, era lo que me estaba faltando, en mi vida, siempre tuve y he tenido más de lo que podría pedir y ahí estaba creciendo dentro de mi, ese regalito mágico, que yo no imaginé, puso feliz al mundo. Ya no me importaba lo que pudiese decir o pensar el resto… fue una hermosa noticia.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario